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4 de Septiembre / Santa Rosalía de Palermo, año 1130- † 1164

Patrona de Palermo (Italia), que goza de una gran devoción en Sicilia lo mismo que las mártires Agueda de Catama y Lucía de Siracusa, no tiene una historia igualmente rica de testimonios y tradiciones. Octavio Gaietani, lamentaba no haber encontrado huellas dejadas por los antepasados sobre esta Santa, a pesar de haberlas buscado en todas partes con mucho cuidado. Parece que la Santa, a los tres años de su muerte, pensó en colmar esta laguna apareciéndose a una mujer enferma, y ordenándole que fuera en peregrinación a la iglesia sobre el monte Pellegrino, un áspero promontorio que cierra el golfo de Palermo. La mujer esperó el mes de mayo siguiente para satisfacer el deseo de Santa Rosalía, que se le volvió a aparecer y le dijo el lugar en donde se encontraban sus restos. Las búsquedas terminaron exitosamente, pero los huesos hallados en una gruta excavada entre las piedras no tenían ninguna inscripción que señalara su pertenencia.

En ese mismo tiempo, cuarenta días después del hallazgo de los huesos, dos albañiles, mientras trabajaban en el convento dominico de San Esteban de Quisquina, encontraron en una gruta una inscripción latina, muy rudimental, que decía: «Ego Rosalía Sinibaldi Quisquinae et Rosarum Domini filia amore Domini mei Jesu Christi in hoc antro habitari decrevi»: «Yo Rosalía Sinibaldi, hija de las rosas del Señor, por amor de mi Señor Jesucristo he decidido vivir en esta caverna de Quisquina». Esto confirmaba en parte las tradiciones orales, recogidas por el mismo Gaietani, que hablaban de Rosalía, que nació en Palermo y vivió durante algunos años en la corte de la reina Margarita, esposa del rey Guillermo I de Sicilia.

La reina le regaló el monte Pellegrino, y Rosalía fue a vivir allí por la soledad que ofrecía. Vivió haciendo penitencia, y allí murió después de haber peregrinado por otros lugares más desiertos, siguiendo el ejemplo de los antiguos anacoretas.

Fuente: Familiario

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

Santa Rosalía de Palermo, año 1130- † 1164

Dios quiere que sepamos de los Santos, por eso permite que los Santos puedan conectar con las personas vivas, para que les hagan favores, de la misma manera que ellos hacen favores a los vivos.

Así hizo Santa Rosalía de Palermo. Ella, que tantas gracias consiguió de Dios para las almas, con sus penitencias y gran soledad humana, más nunca estuvo sola espiritualmente, porque los ángeles revoloteaban alegres en su cueva, al ver como ese amor tan grande que sentía por Dios y por las almas de los vivos la llevaba a esos tan grandes sacrificios por amor. Vivió en caridad; siempre con Dios nuestro Señor Jesucristo.

P. Jesús

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