Saltar al contenido

9 de Julio / San Nicolas Pieck y Compañeros, Mártires

En 1572 los calvinistas ahorcaron en Gorkum , Suiza, a 19 sacerdotes y religiosos a causa de su fe católica. Once los mártires eran frailes menores de la Observancia, entre ellos se contaban San Nicolás Pieck, guardián del convento de Gorkum y San Jerónimo Weerden, su vicario. Junto con ellos fueron ejecutados Juan Van Oosterwyk, canónigo regular de San Agustín, los sacerdotes diocesanos Leonardo Vechel, Nicolás Janssen y Godofredo Van Fuynen. 

Luego que el destacamento calvinista conocido con el nombre de la «armada de los piratas» se apoderara de la ciudad de Gorkum, el grupo estuvo a merced de los soldados y sometidos a sus crueles tratos como consecuencia del odio a la de los calvinistas y a la negativa del grupo de revelar dónde habían ocultado sus implementos eucarísticos. Pese a que les ofrecieron la libertad a cambio de que abjuraran de la Eucaristía y rechazaran la supremacía pontificia, los mártires no cedieron y fueron ejecutados en un granero aledaño a Gorkum. Fueron canonizados en 1867.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Nicolas Pieck y Compañeros, Mártires

Dejarse matar, antes que morir por dentro, al renunciar a Dios. Eso hacen los santos, y eso hicieron San Nicolas Pieck y Compañeros, todos mártires por la fe.

A ver, hablemos de martirios, de mortificación diaria a algunas cosas que te trae la misma vida, como por ejemplo el que no todos estén de acuerdo contigo. Sí eso he dicho: que sufras, que aceptes sufrir porque no están de acuerdo contigo en todo y, precisamente son las personas que amas. ¡Déjales que no piensen y vean las cosas como tú! ¿A ver si eres capaz de callar y además relacionarte con ellos?, sabiendo que tú tienes razón y ellos no, y todo y así, te relacionas con ellos, y haciendo la tuya, vives la mortificación, libremente, que te dan, y aceptando sus comentarios, sufres por dentro, mientras, como digo, haces la tuya, que es la de Dios, y además aceptas que te fastidien, y te añado que además no puedes fastidiarlos tú, sino que debes ser bueno siempre. ¡Eso es un martirio también, si lo haces todo por amor a Dios! ¿Te atreves?

Hay santos en este mundo actual de la democracia, porque no abandonan su fe, no abandonan a la Eucaristía, aunque se lo pidan. ¡Eso es la santidad!

P. Jesús

© copyright