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Santoral Septiembre - 3. página

21 de Septiembre / San Mateo, Apóstol y Evangelista

Dos de los cuatro evangelistas dan a San Mateo el nombre de Leví, mientras que San Marcos lo llama, «hijo de Alfeo». Posiblemente Leví era su nombre original y adoptó el mismo el nombre de Mateo cuando se convirtió en seguidor de Jesús. 

San Mateo era galileo por nacimiento y se sabe con certeza que su profesión era la de publicano, o recolector de impuestos para los romanos, oficio considerado infame para los judíos. El llamado a San Mateo ocurrió en el segundo año del ministerio público de Jesucristo, y éste le adoptó enseguida en la santa familia de los Apóstoles; desde el momento del llamado, el evangelista siguió al Señor hasta el término de su vida terrena y sin duda escribió su Evangelio a pedido de los judíos convertidos en lengua aramea. 

San Mateo, tras haber recogido una abundante cosecha de almas en Judea, se fue a predicar la doctrina de Cristo en las naciones de oriente, pero nada cierto se sabe de ese periodo de su existencia. La Iglesia también lo venera como mártir, no obstante que hasta la fecha, se desconoce las causas y el lugar de su muerte.

Fuente: EWTN

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Mateo, Apóstol y Evangelista

Dios no eligió a sus apóstoles el mismo día, sino que los fue eligiendo al pasar el tiempo, y se fijaba bien en quién debía ser de los suyos. Tú debes hacer igual, y no te precipites en dar tu amistad y tu confianza a la ligera, antes vigila y estate alerta, y espera hallar a un San Mateo, para ser tu fiel compañero.

P. Jesús
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22 de Septiembre / San Alfonso de Orozco

Nació en la localidad de Oropesa, Diócesis de Ávila, en el año de 1500, y desde temprana edad sintió el fervoroso deseo de consagrarse al servicio de Dios. Realizó sus estudios en Talavera y en Toledo para luego continuarlos en la universidad de Salamanca, donde gracias a los sermones de Santo Tomás de Villanueva, tomó los hábitos de la orden de lo Ermitaños de San Agustín a la edad de 22 años. 

Tras su ordenación, Fray Alfonso se entregó en cuerpo y alma a la enseñanza, la predicación y otras actividades de su apostolado, y su profundo conocimiento del alma humana y su evidente bondad, le hicieron muy solicitado como confesor. En cuatro ocasiones, fue prior de otras tantas casas de agustinos y dos años más tarde fue nombrado predicador de la corte y enseguida comenzó a ejercer su influencia sobre la nobleza, a quienes atraía tanto por la elocuencia de sus sermones como por la calidad exquisita de su música, a la que era muy afecto y destacaba por su destreza. 

Durante treinta años realizó el trabajo de mantener la vida cristiana en su más alto nivel de entre la nobleza y la gentilidad, así como entre la servidumbre de la corte española. Falleció a la edad de noventa años, fue beatificado en 1881, y canonizado en el 2002 por Juan Pablo II.

Fuente: EWTN

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Alfonso de Orozco

Es necesario tener buenos y santos ejemplos, como San Alfonso de Orozco, que ayudando a Dios, cambió y dirigió buen parte de la vida espiritual de la nobleza española en su tiempo.

Los santos dejan su sello, tú debes dejarlo también, porque tú serás santo, si dejas que Dios obre en ti, como lo dejó San Alfonso de Orozco, al que Dios le concedió dones musicales para deleitar el alma con la música, y también sus santas palabras.

P. Jesús

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23 de Septiembre / San Pío de Pietrelcina

El padre Francesco Forgione nació en Pietrelcina, provincia de Benevento, el 25 de mayo de 1887. Sus padres fueron Horacio Forgione y María Giuseppa. Creció dentro de una familia humilde, pero como un día él mismo dijo, nunca careció de nada. 

Fue un niño muy sensible y espiritual. En la Iglesia Santa María de los Ángeles, la cual se podría decir fue como su hogar, fue bautizado, hizo la Primera Comunión y la Confirmación. También en esta misma Iglesia fue donde a los cinco años se le apareció el Sagrado Corazón de Jesús. Más adelante empieza a tener apariciones de la Virgen María que durarían por el resto de su vida. 

Ingresó a la Orden de los Frailes Menores Capuchinos en Morcone en enero de 1903. El día anterior de entrar al Seminario, Francisco tuvo una visión de Jesús con su Santísima Madre. En esta visión Jesús puso su mano en el hombro de Francisco, dándole coraje y fortaleza para seguir adelante. La Virgen María, por su parte, le habló suave, sutil y maternalmente penetrando en lo más profundo de su alma. 

Fue ordenado sacerdote el 10 de agosto de 1910 en la Catedral de Beneveto, y en febrero de ese año se estableció en San Giovanni Rotondo, donde permaneció hasta su muerte, el 23 de setiembre de 1968. 

Poco después de su ordenación, le volvieron las fiebres y los males que siempre le aquejaron durante sus estudios, y es enviado a su pueblo, Pietrelcina, para que se restableciera de salud. Luego de 8 años de sacerdocio, el 20 de setiembre de 1918, recibe los estigmas de Nuestro Señor Jesucristo en sus manos, pies y costado izquierdo, convirtiéndose en el primer sacerdote estigmatizado. En una carta que escribe a su director espiritual los describe así: «En medio de las manos apareció una mancha roja, del tamaño de un centavo, acompañada de un intenso dolor. También debajo de los pies siento dolor». 

Más adelante, en el año de 1940 proyectó un hospital que se denominó «Casa del Alivio del Sufrimiento» -el más importante del sur de Italia-, cuya construcción culminó en 1956. 

El 20 de septiembre de 1968 el Padre Pío cumplió 50 años de haber recibido por primera vez los estigmas del Señor Jesús. El Padre Pío celebró la Misa a la hora acostumbrada. Alrededor del altar hubieron 50 grandes macetas con rosas rojas para sus 50 años de sangre… A los dos días murmurando por largas horas «Jesús, María!», muere el Padre Pío, el 22 de septiembre de 1968. Los que estaban presentes quedaron largo tiempo en silencio y en oración. Después estalló un largo e irrefrenable llanto. 

El funeral del Padre Pío fue impresionante ya que se tuvo que esperar cuatro días para que la multitud de personas pasaran a despedirse. Se calcula que más de cien mil personas participaron del entierro. Al morir desaparecieron los estigmas con el cual el Señor ha confirmado su origen místico y sobrenatural. 

Muchas han sido las sanaciones y conversiones concedidas por la intercesión del Padre Pío e innumerables milagros han sido reportados a la Santa Sede. 

El 18 de diciembre, de 1997, Su Santidad Juan Pablo II pronunció venerable al Padre Pío. Este paso, aunque no tan ceremonioso como la beatificación y canonización, es ciertamente la parte más importante del proceso. 

Fue beatificado por su S.S. Juan Pablo II el 2 de mayo de 1999 en una solemne Concelebración Eucarística en la Plaza San Pedro. 

El 16 de junio del 2002 fue declarado San Pío de Pietrelcina en presencia de S.S. Juan Pablo II, en una solemne misa en la Plaza San Pedro.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Pío de Pietrelcina

Ay, los santos, ¡cuánto sufren los santos y cuánto bien hacen a la Iglesia y al mundo entero!

Con la vida de San Pío de Pietrelcina, vemos sus sufrimientos y vemos las delicadezas que tiene Santa María, y Jesús, que es Dios, con ellos. Dios Padre lo tiene en su ‘punto de mira’, para darle las Gracias oportunas para su salvación y la salvación de muchos, por esas mismas gracias, y tiene también todo el Amor de Dios Espíritu Santo, amándole. Sí que les atormenta Satanás mismo y sus secuaces, los demonios, y también las malas y necias personas, que hay tantas en el mundo, incluso en la misma y Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana. Ser santo es sufrir, estando en vida, con Dios y la Virgen María. Muchos otros sufren y no tienen a la Divina Trinidad y no tienen a María. Sufrir es humano; recibir el amor de Dios y su Madre bendita, es divino. Los santos lo saben y ¡son santos!

P. Jesús
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23 de Septiembre / San Pío de Pietrelcina

El Padre Pío nació en el seno de una humilde y religiosa familia de agricultores, el 25 de mayo de 1887, en una pequeña aldea del Sur de Italia, llamada Pietrelcina. Recibió su primera instrucción de un maestro privado y a la edad de 15 años hizo su ingreso en el Noviciado de los Padres Capuchinos en la Ciudad de Morcone.

De débil salud, pero de excepcional fuerza de voluntad, pudo completar sus estudios y gracias a una continua asistencia divina tuvo la ansiada ordenación sacerdotal. El 20 de Septiembre de 1918, aparecieron visiblemente las llagas de Nuestro Señor en sus manos, pies y costado izquierdo del pecho, haciendo del P. Pío el primer sacerdote estigmatizado en la historia de la Iglesia (recuerden que San Francisco no era sacerdote). Grandes multitudes, de todas las nacionalidades pasaron por su confesionario. Las conversiones fueron innumerables.

Diariamente recibía centenares de cartas de fieles, que pedían su consejo iluminado y su dirección espiritual, la cual ha siempre significado un retorno a la serenidad, a la paz espiritual y al coloquio con Dios. Toda su vida no ha sido otra cosa que una continua oración y penitencia, lo cual no impedía que sembrase a su alrededor felicidad y gran alegría entre aquellos que escuchaban sus palabras, que eran llenas de sabiduría o de un extraordinario sentido del humor. El Papa Juan Pablo II lo conoció personalmente en 1947, poco después de su ordenación sacerdotal. El Padre Pío profetizó que aquel joven sacerdote sería un día Papa. El Señor lo llamó a recibir el premio celestial el 23 de Septiembre de 1968. Tenía 81 años.

Durante 4 días su cuerpo fue expuesto ante millares de personas que formaban una enorme columna que no conoció interrupción hasta el momento del funeral, al cual asistieron más de cien mil personas. Millones visitan su tumba en el pueblo de San Giovanni Rotondo, Italia. Entre ellos el Papa Juan Pablo II. El P. Pío está sepultado en la cripta del Santuario de Nuestra Señora de las Gracias, San Giovanni Rotondo.

Los preliminares de su Causa de Beatificación y Canonización se iniciaron en noviembre de 1969. Declarado Venerable el 18 de diciembre de 1997 y Beato, el 2 de mayo de 1999. Declarado Santo el 16 de junio de 2002, en la Plaza de San Pedro en Roma, por S.S. Juan Pablo II. Fechas importante en la vida de San Pío Pietrelcina  25 de mayo, 1887. Nace en Pietrelcina, Benevento, en el sur de Italia. Sus padres, Grazio «Orazio» Mario Forgione (1860-1946), granjero, y María Giuseppa de Nunzio Forgione (1859-1929). 26 de mayo, 1887. Bautizado en la Iglesia de Santa María de los   Ángeles. Recibe el nombre de Francesco Forgione. 27 de mayo, 1899. Recibe el Sacramento de la Confirmación. 6 y 22 de enero, 1903.

A los dieciséis años entra al noviciado de Marcone. El 22 de enero es investido con el hábito de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos. Toma el nombre de Fra Pío (Fra por Fratello/Hermano). 22 de enero, 1904. Terminado el año de noviciado hace la Primera Profesión (profesión temporal) de los Consejos Evangélicos de Pobreza, Castidad y Obediencia.  Entra al convento de la provincia monástica y estudia para ordenarse sacerdote. 1907.

Al cumplirse los tres años de los votos temporales hace su  profesión perpetua o votos solemnes. 10 de agosto, 1910. Con férrea voluntad se sobrepone a graves problemas de salud, es ordenando sacerdote en la capilla del Arzobispo de Beneveto, pero los problemas de salud le obligan a residir con su familia, por largos períodos, hasta el 1916. Septiembre, 1910. Recibe los estigmas visiblemente por primera vez, pero por poco tiempo y de forma intermitente. 

Ruega a Dios se los quite. Confía el acontecimiento únicamente a su Director Espiritual. Noviembre, 1911. El suceso sobrenatural llega a la atención de sus superiores cuando es observado un día en éxtasis. 28 de julio, 1916. Llega al Convento de San Giovanni Rotondo y permanece allí hasta su muerte. 5 a 7 de agosto, 1918. Transverberación del corazón, le causan heridas visibles en su costado. (La Transverberación del corazón es una experiencia mística de ser traspasado en el corazón, que indica la unión de amor con Dios.) 20 de septiembre, 1918. Mientras reza, luego de la Misa, en el área del coro de la antigua Iglesia de Nuestra Señora de las Gracias, aparecen los estigmas de forma visible y permanen- te.  El fenómeno perdurará por los próximos 50 años. 1919.

Comienzan a circular rumores en el pueblo del posible traslado del ¨santo¨ de San Giovanni Rotondo, lo que agita grandemente a la población. 2 de junio, 1922. El Santo Oficio (hoy Congregación para la Doctrina de la Fe) prohíbe apariciones públicas y el acceso del público a Padre Pió. 1924-1931. En varias ocasiones la Santa Sede rechaza que el fenómeno sea de origen sobrenatural. 9 de junio, 1931. (Solemnidad de Corpus Christi). La Santa Sede ordena al Padre Pío desistir de toda actividad salvo la celebración de la Santa Misa, la cual sólo podrá celebrar en privado.  

Principios de 1933. El Santo Padre Pío XI ordena al Santo Oficio que de marcha atrás y deje sin efecto la  prohibición que pesaba sobre el Padre Pío de celebrar públicamente. Su Santidad Pío XI comenta al respecto: «Nunca sentí mala disposición hacia el Padre Pío, pero sí fui malamente informado.» 1934. Las facultades del Padre Pío son restauradas poco a poco. Se le permite confesar primero a hombres (25 de marzo, 1934) y luego confesar a mujeres (12 de mayo, 1934). 23 de septiembre de 1968. Fallece serenamente en su celda a las 2:30 de la madrugada. Murió saludable y sin los estigmas, así como había profetizado en cierta ocasión. Sus últimas palabras: «Gesú e Maria» (Jesús y María). 26 de septiembre, 1968.

El cuerpo del Padre Pío se entierra en una cripta en la Iglesia de Nuestra Señora de las Gracias. Asisten al funeral más de 100.000 personas.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Pío Pietrelcina

Hay que asistir a los funerales y hay que celebrar una Santa Misa por el difunto; es necesario ser respetuosos con el cuerpo muerto y con el alma inmortal.

Muchos amaron a San Pío de Pietrelcina y, algunos de la misma Iglesia Santa, lo odiaron hasta no dar veracidad en sus informes ante el Papa Pío XI. Pero todo se llega a saber en este mundo y los Santos sólo viven para Dios y, mientras son castigados por el hombre, ellos, en su penitencia sin pecado, ayudan a salvar al mundo, y Dios lo permite todo para el bien de la Santa Madre Iglesia Católica.

La Historia nos muestra una vez más que Dios gana, como siempre va a ganar, y que las fechorías de los que no obran bien, siempre las aprovecha Nuestro Señor Jesús para dar más bendiciones al mundo.

Aprendemos de San Pío de Pietrelcina que sufrir por Dios siempre lleva su gratificación: Es Santo. ¡Aleluya!

P. Jesús

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24 de Septiembre / Fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes

La Santísima Virgen se le apareció a San Pedro Nolasco, en 1218, recomendándole que fundara una comunidad religiosa que se dedicara a auxiliar a los cautivos que eran llevados a sitios lejanos. Esta advocación mariana nace en España y se difunde por el resto del mundo. 

San Pedro Nolasco, inspirado por la Santísima Virgen, funda una orden dedicada a la merced (que significa obras de misericordia). Su misión era la misericordia para con los cristianos cautivos en manos de los musulmanes. Muchos de los miembros de la orden canjeaban sus vidas por la de presos y esclavos. Fue apoyado por el rey Jaime el Conquistador y aconsejado por San Raimundo de Peñafort. 

San Pedro Nolasco y sus frailes muy devotos de la Virgen María, la tomaron como patrona y guía. Su espiritualidad es fundamentada en Jesús el liberador de la humanidad y en la Santísima Virgen, la Madre liberadora e ideal de la persona libre. Los mercedarios querían ser caballeros de la Virgen María al servicio de su obra redentora. Por eso la honran como Madre de la Merced o Virgen Redentora. 

En 1272, tras la muerte del fundador, los frailes toman oficialmente el nombre de La Orden de Santa María de la Merced, de la redención de los cautivos, pero son mas conocidos como mercedarios. El Padre Antonio Quexal en 1406, siendo general de la Merced, dice: «María es fundamento y cabeza de nuestra orden». 

Esta comunidad religiosa se ha dedicado por siglos a ayudar a los prisioneros y ha tenido mártires y santos. Sus religiosos rescataron muchísimos cautivos que estaban presos en manos de los feroces sarracenos. 

El Padre Gaver, en 1400, relata como La Virgen llama a San Pedro Nolasco y le revela su deseo de ser liberadora a través de una orden dedicada a la liberación. 

Nolasco le pide ayuda a Dios y, en signo de la misericordia divina, le responde La Virgen María diciéndole que funde una orden liberadora. 

Desde el año 1259 los padres Mercedarios empiezan a difundir la devoción a Nuestra Señora de la Merced (o de las Mercedes) la cual se extiende por el mundo. 

América 

Los mercedarios llegan al continente americano y pronto la devoción a la Virgen de la Merced se propaga ampliamente. En República Dominicana, Perú, Argentina y muchos otros países, la Virgen de la Merced es muy conocida y amada. 

NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED
ESPAÑA
 

En los últimos siglos de la Edad Media, los árabes tenían en su poder el sur y el levante español y sus vidas en vilo. Los turcos y sarracenos habían infestado el Mediterráneo, y atacaban a los barcos que desembarcaban en las costas llevándose cautivos; a muchos. 

Un alma caritativa, suscitada por Dios, a favor de los cautivos, fue San Pedro Nolasco, de Barcelona, llamado el Cónsul de la Libertad. Se preguntaba cómo poner remedio a tan triste situación y le rogaba insistentemente a la Virgen María. 

Pronto empezó a actuar en la compra y rescate de cautivos, vendiendo cuanto tenía. La noche del 1 de agosto de 1218, Nolasco estando en oración, se le apareció la Virgen María, le animó en sus intentos y le transmitió el mandato de fundar la Orden Religiosa de la Merced para redención de cautivos. Pocos días después, Nolasco cumplía el mandato. Los mercedarios se comprometían con un cuarto voto: liberar a otros más débiles en la fe quedando como rehenes, si fuera necesario. 

De este modo, a través de los miembros de la Nueva Orden, la Virgen María, Madre y Corredentora, Medianera de todas las gracias, aliviaría a sus hijos cautivos y a todos los que suspiraban a ella, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. A todos daría la merced de su favor. 

La Virgen María tendrá desde ahora la advocación de la Merced, o más bello todavía en plural: Nuestra Señora de las Mercedes, indicando así la abundancia incontable de sus gracias. ¡Hermosa advocación y hermoso nombre el de Mercedes! 

Nuestra Señora de las Mercedes concedería a sus hijos la merced de la liberación. Alfonso X el Sabio decía que «sacar a los hombres de cautivo es cosa que place mucho a Dios, porque es obra de la Merced». 

Bajo la protección de Nuestra Señora de la Merced, los frailes mercedarios realizaron una labor ingente. Como ingentes fueron los sufrimientos de San Pedro Nolasco, San Ramón Nonato y San Pedro Armengol. Y no faltaron mártires como San Serapio, San Pedro Pascual y otros muchos. 

El culto a Nuestra Señora de la Merced se extendió muy pronto por Cataluña y por toda España, por Francia y por Italia, a partir del siglo XIII. El año 1265 aparecieron las primeras monjas mercedarias. Los mercedarios estuvieron entre los primeros misioneros de América. En la Española o República Dominicana, por ejemplo, misionó Fray Gabriel Téllez (Tirso de Molina). 

Barcelona se gloria de haber sido escogida por Nuestra Señora de la Merced como lugar de su aparición y la tiene por celestial patrona. »¡Princesa de Barcelona, protegiu nostra ciutat!» 

En el museo de Valencia hay un cuadro de Vicente López en el que varias figuras vuelven su rostro hacia la Virgen de la Merced, como implorándole, mientras la Virgen abre sus brazos y extiende su manto, cubriéndolos a todos con amor, reflejando así su título de Santa María de la Merced. 

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES DE TUCUMÁN
ARGENTINA
 

Tucumán, fue fundada por don Diego de Villarroel en 1565, pero el día de Nuestra Señora de las Mercedes de 1685 fue trasladada al sitio actual. 

El Cabildo en 1687 nombró a Nuestra Señora de las Mercedes como Patrona y Abogada de la ciudad, por los muchos favores que la Virgen dispensó a los tucumanos. 

La victoria argentina en la batalla de Tucumán del 24 de septiembre de 1812, es acreditada a Nuestra Señora de las Mercedes. En ella se decidió la suerte de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Los españoles eran unos tres mil y los argentinos apenas mil ochocientos. Belgrano, el general argentino, puso su confianza en Dios y en Nuestra Señora de las Mercedes, a quien eligió por Patrona de su Ejército. 

En la mañana del 24 de septiembre de 1812, día del combate, el general Belgrano estuvo orando largo rato ante el altar de la Virgen. El ejército argentino obtuvo la victoria. En el parte que transmitió al Gobierno, Belgrano hizo resaltar que la victoria se obtuvo el día de Nuestra Señora de las Mercedes, bajo cuya protección se habían puesto las tropas. 

El parte dice textualmente: ‘La patria puede gloriarse de la completa victoria que han tenido sus armas el día 24 del corriente, día de Nuestra Señora de las Mercedes bajo cuya protección nos pusimos «. 

El general Belgrano puso en manos de la imagen de la Virgen su bastón de mando. La entrega se efectuó durante una solemne procesión con todo el ejército, que terminó en el Campo de las Carreras, donde se había librado la batalla. 

Belgrano se dirigió hacia las andas en que era conducida la imagen de Nuestra Señora de las Mercedes, y le entregó el bastón que llevaba, poniéndolo en las manos de la Virgen y proclamándola como Generala del Ejército. 

Al tener conocimiento de estos actos de devoción las religiosas de Buenos Aires, remitieron a Belgrano cuatro mil escapularios de Nuestra Señora de la Merced para que los distribuyera a las tropas. El batallón de Tucumán se congregó antes de partir rumbo a Salta, frente al atrio del templo de Merced, donde se les entregaron los escapularios, tanto los jefes como oficiales y tropas los colocaron sobre sus uniformes. 

El 20 de febrero de 1813 los argentinos que buscaban su independencia se enfrentaron nuevamente con los españoles en Salta. Antes de entrar en combate, Belgrano recordó a sus tropas el poder y valimiento de María Santísima y les exhortó a poner en Ella su confianza. Formuló también el voto de ofrendarle los trofeos de la victoria si por su intercesión la obtenía. 

Con la ayuda de la Madre de Dios vencieron nuevamente a los españoles, y de las cinco banderas que cayeron en poder de Belgrano, una la destinó a Nuestra Señora de las Mercedes de Tucumán, dos a la Virgen de Luján y dos a la Catedral de Buenos Aires. 

A partir del año 1812, el culto a Nuestra Señora de las Mercedes adquiere una gran solemnidad y popularidad. En 1813, el Cabildo de Tucumán pide al gobierno eclesiástico la declaración del vicepatronato de Ntra. Sra. de las Mercedes «que se venera en la Iglesia de su religión» y ordena de su parte que los poderes públicos celebren anualmente su fiesta el 24 de septiembre9. La Autoridad Eclesiástica, por Decreto especial, declara el 4 de septiembre de 1813 festivo en homenaje a Nuestra Señora de las Mercedes el 24 de septiembre. 

Después del 31 de agosto de 1843, es declarada oficialmente Vice Patrona, jurando su día por festivo y disponiendo se celebre cada año una Misa solemne con asistencia del Magistrado y que por la tarde se saque la imagen de la Santísima Virgen en procesión, como prueba de gratitud por los beneficios dispensados. 

Al cumplirse el centenario de la batalla y victoria de Tucumán, la imagen de Nuestra Señora de las Mercedes fue coronada solemnemente, en nombre del Papa San Pio X, en 1912. 

El 22 de junio de 1943, el Presidente de la República, General Pedro P. Ramirez, por decreto aprobado el día anterior con sus ministros, dispuso por el artículo 1ro.: 
«Quedan reconocidas con el grado de Generala del Ejército Argentino: la Santísima Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora de las Mercedes, y la Santísima Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora del Carmen». 

Los artículos 2,3 y 5 se refieren a la imposición de la banda y faja que corresponde a los generales de la nación. El gobierno Argentino proclama así, solemnemente, ante el mundo, su religiosidad. 

En 1945, el Gobierno Nacional designó a Nuestra Señora de las Mercedes Patrona Principal de la Aeronáutica Militar. 

En Santa Fe la imagen se venera en el templo del Milagro, Paraná se venera en la catedral, en Córdoba en la Iglesia de los Padres Mercedarios, y así en muchos otros lugares. 

Oración a Nuestra Señora de la Merced 

Generala del Ejército Argentino 
A ti recurrimos, oh Virgen Generala de nuestros Ejércitos, para implorar tu maternal protección sobre esta Patria Argentina. 
Te recordamos que aquí se alzó el altar donde se glorificó a Jesús Eucarístico ante el mundo entero; que nuestra bandera se hizó en la presencia augusta de tu divino Hijo; que los colores nacionales cruzan sobre tu pecho cual blasón de Generala del Ejército Argentino. 
Por todo esto te pedimos que protejas a nuestra Patria erigida según los designios divinos y que del uno al otro confín sepan los pueblos honrarla y que al postrarnos ante tu imagen de Virgen Generala resuene esta unánime aclamación: 
¡Tú eres la gloria de nuestra Patria. Tú eres la honra de nuestro pueblo! ¡Tú la Generala de nuestro Ejército!. 

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES
REPÚBLICA DOMINICANA
 

Una de las imágenes de gran devoción en Santo Domingo, y la más antigua es la de Nuestra Señora de las Mercedes. 

En marzo de 1495 Cristóbal Colón, acompañado de unos cuantos españoles, tuvo que enfrentar a un crecido número de indios acaudillados por un cacique. Levantaron una trinchera y junto a ella colocaron una gran cruz de madera. 

Los indios lograron desalojar a los españoles, quienes de inmediato se replegaron a un cerro. Mientras tanto los indios prendieron fuego a la cruz y con hachas intentaban destruirla, sin poder lograrlo. Ante la agresividad de los indios, Colón y la mayoría de la tropa decidieron retirarse del lugar. Sin embargo el mercedario Fray Juan Infante, confesor de Colón, que llevaba consigo una imagen de Nuestra Señora de las Mercedes, exhortó a los españoles a seguir combatiendo y les prometió la victoria en nombre de la Virgen. 

Al día siguiente las fuerzas de Colón obtuvieron una increíble victoria frente a los indios, quienes se dispersaron por los montes. Luego de este suceso se construyó un santuario a Nuestra Señora de las Mercedes en la misma cumbre del cerro donde Colón colocó la milagrosa cruz. 

Nuestra Señora de la Merced
Patrona de Perú
 

La devoción a Nuestra Señora de las Mercedes en el Perú se remonta a los tiempos de la fundación de Lima. Consta que los Padres Mercedarios, que llegaron al Perú junto con los conquistadores, habían edificado ya su primitiva iglesia conventual hacia 1535, templo que sirvió como la primera parroquia de Lima hasta la construcción de la Iglesia Mayor en 1540. 

Los Mercedarios no sólo evangelizaron a la región sino que fueron gestores del desarrollo de la ciudad al edificar los hermosos templos que hoy se conservan como valioso patrimonio histórico, cultural y religioso. 

Junto con estos frailes llegó su celestial patrona, la Virgen de la Merced, advocación mariana del siglo XIII. 

Esta Orden de la Merced, aprobada en 1235 como orden militar por el Papa Gregorio IX, logró liberar a miles de cristianos prisioneros, convirtiéndose posteriormente en una dedicada a las misiones, la enseñanza y a las labores en el campo social. Los frailes mercedarios tomaron su hábito de las vestiduras que llevaba la Virgen en la aparición al fundador de la orden. 

La imagen de la Virgen de la Merced viste totalmente de blanco; sobre su larga túnica lleva un escapulario en el que está impreso, a la altura del pecho, el escudo de la orden. Un manto blanco cubre sus hombros y su larga cabellera aparece velada por una fina mantilla de encajes. En unas imágenes se la representa de pie y en otras sentada; unas veces se muestra con el Niño en los brazos y otras los tiene extendidos mostrando un cetro real en la mano derecha y en la otra unas cadenas abiertas, símbolo de liberación. Esta es la apariencia de la hermosa imagen que se venera en la Basílica de la Merced, en la capital limeña, que fue entronizada a comienzos del siglo XVII y que ha sido considerada como patrona de la capital. 

Fue proclamada en 1730 «Patrona de los Campos del Perú»; «Patrona de las Armas de la República» en 1823; y al cumplirse el primer centenario de la independencia de la nación, la imagen fue solemnemente coronada y recibió el título de «Gran Mariscala del Perú» el día 24 de septiembre de 1921, solemnidad de Nuestra Señora de la Merced, desde entonces declarada fiesta nacional, ocasión en que cada año el ejército le rinde honores a su alta jerarquía militar de «Mariscala». La imagen porta numerosas condecoraciones otorgadas por la república de Perú y sus gobernantes e instituciones nacionales. En 1970 el cabildo de Lima le otorgó las «Llaves de la ciudad» y en 1971 el presidente de la República le impuso la Gran Cruz Peruana al Mérito Naval, gestos que demuestran el cariño y la devoción del Perú a esta advocación considerada por muchos como su Patrona Nacional.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

Fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes

Hazte devoto y propagador de la Virgen de la Merced, porque tú necesitas que te conceda sus mercedes, y Ella, la Virgen María de las Mercedes, quiere dártelas, si tú se las pides. Confía en Ella, es la Madre de Dios, y es tú Señora. Dile: “Señora mía, Oh Virgen, Madre mía,  quiero tus mercedes, para ser feliz otro día en la Vida Eterna y ser bueno y recibir el bien en esta vida terrena. Amén”.

P. Jesús

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25 de Septiembre / San Carlos de Sezze, Franciscano

Nació en 1620 en el pueblo italiano de Sezze. Un día una bandada de aves espantó a los bueyes que Carlos dirigía cuando estaba arando, y estos arremetieron contra él con grave peligro de matarlo. Cuando sintió que iba a perecer en el accidente, prometió a Dios que si le salvaba la vida se haría religioso. Y milagrosamente quedó ileso. Pidió entonces a unos religiosos franciscanos que le ayudaran a entrar en su comunidad y ellos lo invitaron a que fuese a Roma para que hablara con el superior de la congregación. Así lo hizo junto con tres compañeros más y tras ser probados en la humildad tratándolos con mucha dureza, el superior accedió a admitirlos. 

Ante el pedido de muchas personas que le pedían incesantemente que redactase algunas normas para orar mejor y crecer en santidad, el santo publicó un folletín causándole diversas dificultades por lo que casi es expulsado de su comunidad. Humillado se arrodilló ante un crucifijo para contarle sus angustias, y oyó que Nuestro Señor le decía: «Ánimo, que estas cosas no te van a impedir entrar en el paraíso». 
La petición más frecuente del hermano Carlos a Dios era esta: «Señor, enciéndeme en amor a Ti». Y tanto la repitió que un día durante la elevación de la santa hostia en la Misa, sintió que un rayo de luz salía de la Sagrada Forma y llegaba a su corazón. Al fin los superiores se convencieron de que este sencillo religioso era un verdadero hombre de Dios y le permitieron escribir su autobiografía y publicar dos libros más, uno acerca de la oración y otro acerca de la meditación. 

El Papa Juan XXIII lo declaró santo en 1959, porque su vida es un ejemplo de que aún en los oficios más humildes y en medio de humillaciones e incomprensiones podemos llegar a un alto grado de santidad y ganarnos la gloria del cielo.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Carlos de Sezze, Franciscano

Dios dijo a San Carlos de Sezze, Franciscano, «Ánimo, que estas cosas no te van a impedir entrar en el Paraíso», y también Dios te las dice a ti, cuando te humillan los que deberían amarte, cuando te calumnian y te juzgan mal, cuando sufres y pierdes dinero y bienes, cuando estás enfermo o te hacen sufrir los errores y pecados de los demás. Dios sabe que todo eso que te dan y recibes o tienes, Dios sabe que todo eso no va a impedirte entrar en el Paraíso. Lo que te impide entrar en el Paraíso, de eso sí: duélete y con razón. De lo demás, aguanta, y si no pudieras más: morirías. Es decir, mientras vivas puedes aguantar y, si por ejemplo no puedes luchar más contra la enfermedad, ella te lleva a la muerte y por la muerte al Paraíso. Pero, lo puedes resistir todo antes que pecar. Llora, y reza. Dios te dice: «Ánimo, que estas cosas no te van a impedir entrar en el Paraíso».

P. Jesús

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26 de Septiembre / San Cosme y San Damián, Mártires

Estos dos santos han sido, junto con San Lucas, los patronos de los médicos católicos. En oriente los llaman «los no cobradores», porque ejercían la medicina sin cobrar nada a los pacientes pobres. Lo único que les pedían era que les permitieran hablarles por unos minutos acerca de Jesucristo y de su Evangelio. 

Lisias, el gobernador de Cilicia, se disgustó mucho porque estos dos hermanos propagaban efectivamente el cristianismo. Trató inútilmente de que dejaran de predicar, y como no lo consiguió, mandó echarlos al mar. Pero una ola gigantesca los llevó sanos y salvos a la orilla. Entonces los mandó quemar vivos, pero las llamas no los tocaron, y en cambio quemaron a los verdugos paganos que los querían atormentar. Entonces el mandatario pagano mandó que les cortaran la cabeza. Finalmente, derramaron su sangre por proclamar el amor al Divino Salvador. 

Junto a la tumba de los dos hermanos gemelos, empezaron a obrarse milagrosas curaciones. El emperador Justiniano de Constantinopla, padeciendo de una grave enfermedad, se encomendó a estos dos santos mártires y fue curado inexplicablemente.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Cosme y San Damián, Mártires

Muchos tormentos y muchas gracias concedió Dios a San Cosme y San Damián, pero también llegó la muerte y muerte cruel para ellos. ¡No temas a la muerte porque es Vida! Sin la muerte no podrías pasar a mejor vida. Un día u otro deberás morir, y será cuando Dios lo decida y no los hombres, porque el nacer y el morir son cosas de Dios. Ten fe y ten valor, y si tienes una grave enfermedad, pide por la intercesión de Santa María tu curación, y puede que te la dé o puede que no, pero algo es verdad, aunque te cures milagrosamente, llegará el día, la fecha de tu entrada en la Vida Eterna. Mira de ir al Cielo, porque es lo único que vale la pena en esta vida, vivirla para la Vida en el Reino de Dios, junto a María, la Madre de Dios y tuya, la Niña judía que unió el antiguo y el nuevo Testamento: La Gracia de Dios que estaba en Ella, y que por Ella y con Ella, con María, nos derramó ese nuevo Testamento: Herederos de Dios, por Jesús Rey del Universo: Dios Hijo e hijo de María Madre de Dios. ¡Confía!, que Ella te espera. No estás solo con tu dolor; no estás sola con tu dolor: Tienes a Jesús, tienes a María y tienes a la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana, que los santos la sostienen; Tú debes sostenerla: ¡Santo! ¡Santa!

P. Jesús
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27 de Septiembre / San Vicente de Paul

Nació en el pueblecito de Pouy en Francia, en 1580. San Vicente -cuyo nombre significa victorioso- solía decir, por experiencia propia, a los impacientes: «Tres veces hablé cuando estaba de mal genio y con ira, y las tres veces dije barbaridades». Por eso cuando le ofendían permanecía siempre callado, en silencio como Jesús en su Santísima Pasión». 

El Ministro Gondi nombró al P. Vicente como capellán de las grandes regiones donde tenía sus haciendas, descubriendo con horror que los campesinos ignoraban totalmente la religión; que las pocas confesiones que hacía eran sacrílegas porque callaban casi todo, y que no tenían quién les instruyera. 

Se consiguió un grupo de sacerdotes amigos, y empezó a predicar misiones por esos pueblos. La gente acudía por centenares y miles a escuchar los sermones, se confesaban y enmendaban su vida. Fue ahí donde vio la necesidad de fundar la Comunidad de Padres Vicentinos, dedicada a instruir y ayudar a los más necesitados. La obra apostólica del santo se extendió velozmente fundando no sólo comunidades sino también grupos de caridad para ayudar e instruir a las gentes más pobres; sin embargo, para dirigir las misiones el santo vio la necesidad de que sean religiosas quienes lo ayudasen fundando la comunidad de las hermanas vicentinas a cargo de Santa Luisa de Marillac. 

Murió el 27 de septiembre de 1660, a los 80 años de edad. El Santo Padre León XIII lo proclamó Patrono de todas las asociaciones católicas de caridad.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Vicente de Paul

«Tres veces hablé cuando estaba de mal genio y con ira, y las tres veces dije barbaridades». Por eso cuando le ofendían permanecía siempre callado, en silencio como Jesús en su Santísima Pasión». Acuérdate del veraz comentario de San Vicente de Paul, y haz como Jesús y como hacía luego el mismo San Vicente de Paul, que callaba. Calla y no te arrepentirás de hablar mal, porque lo mismo que quieres decir, lo podrás decir pero de otra manera; sin perder la Gracia y por tanto lo dirás con caridad, para ayudar y no para protegerte. Protegerte ¿de qué? ¡Tú eres libre!, y mientras no peques, y mientras no vayas contra ningún mandamiento de la Ley de Dios, entonces, vas bien, y puedes ir mal si haces caso a lo que te dicen personas que son libres pero que no practican la caridad. Todo aquel que no practica la caridad, miente cuando dice que tiene fe, porque la fe tiene obras de Amor a Dios y por Dios y con Dios a todos los hombres.

Si tienes que perder la caridad: Calla. Es más grato a Dios este ejercicio que la misma flagelación; y en cuanto al ayuno, lo que hace, es ayudar al cuerpo a poder dominarlo, y por el ayuno tú callas más, eres mejor y tienes paz. El ayuno es bueno para personas que no tienen paciencia, les ayuda a la caridad.

El ayuno sólo se puede practicar si tu cuerpo esta bien. Hablo del ayuno-ayuno, y no de dejar de comer unas horas. Hablo de 24 horas sin comer. Lo otro no es ayuno, aunque se le llama ayuno, pero no lo es. Y si no busca en el diccionario. Llámalo de otra manera. Porque cuando Dios Jesús ayunó cuarenta días y cuarenta noches, fue sin comer nada. ¡Claro que era Dios! Pero las cosas claras: Su cuerpo era de un hombre como tú y como yo, pero el alma de Dios vivificaba y cumplía su misión que es dominar por amor a Dios todo el cuerpo, toda la materia. ¡Sólo Dios!, y algunas almas privilegiadas pueden ayunar; lo otro es cambiar de dieta por un día, puede ser a pan y agua, y esto es agradable a Dios, pero no es ayunar como ayunó Dios mismo: Jesús.

P. Jesús
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28 de Septiembre / San Wenceslao de Bohemia, Mártir

Hijo del rey de Bohemia, Ratislav, el joven príncipe nació en el 907 cerca de Praga. Su abuela, Santa Ludimila, se encargó de la educación de su nieto, inculcándole siempre el amor y servicio al Padre Celestial. Cuando era todavía muy joven, el santo perdió a su padre en una de las batallas contra los magiares; su madre asumió el poder e instauró -bajo la influencia de la nobleza pagana- una política anticristiana y secularista, que convirtió al pueblo en un caos total. Ante esta terrible situación, su abuela trató de persuadir al príncipe para que asumiese el trono para salvaguardia del cristianismo, lo que provocó que los nobles la asesinaran al considerarla una latente amenaza para sus intereses. 

Sin embargo, por desconocidas circunstancias, la reina fue expulsada del trono, y Wenceslao fue proclamado rey por la voluntad del pueblo, y como primera medida, anunció que apoyaría decididamente a la Ley de la Iglesia de Dios. Instauró el orden social al imponer severos castigos a los culpables de asesinato o de ejercer esclavitud y además gobernó siempre con justicia y misericordia. 

Por oscuros intereses políticos, Boleslao -que ambicionaba el trono de su hermano-, invitó a Wenceslao a su reino para que participara de los festejos del santo patrono y al terminar las festividades, Boleslao asesinó de una puñalada al santo rey. El pueblo lo proclamó como mártir de la fe, y pronto la Iglesia de San Vito -donde se encuentran sus restos- se convirtió en centro de peregrinaciones. Ha sido proclamado como patrón del pueblo de Bohemia y hoy su devoción es tan grande que se le profesa también como Patrono de Checoslovaquia.

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Wenceslao de Bohemia, Mártir

Si tú eres abuela, cuida de tus nietos, posiblemente puedes ayudarlos a su santidad. Lee la vida del santo rey San Wenceslao de Bohemia. No dejes a tus nietos sin cariño, sin tu ayuda. Y si eres abuelo, también puedes influir en ellos con la santidad que tú mismo debes vivir.

Aprended de la historia, porque la historia habla con los hechos de la fe.

P. Jesús
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29 de Septiembre / San Miguel, San Rafael y San Gabriel

SAN MIGUEL ARCÁNGEL

La fiesta a la que nos referimos hoy, se ha celebrado con gran solemnidad a fines de setiembre, desde el siglo sexto por lo menos. El Martirologio Romano afirma que la festividad se celebra la dedicación de una Basílica en honor de San Miguel, a unos 10 kilómetros al norte de Roma. En el oriente, donde antaño se tenia al arcángel como protector de los enfermos (actualmente se le considera como Capitán de las legiones celestiales y Patrón de los soldados), la veneración a San Miguel es todavía mas antigua.

Aunque solamente a San Miguel se le menciona como titular de la festividad, en las oraciones que pronuncia los fieles en la misa también están comprendidos todos los ángeles y buenos y el glorioso ángel tutelar de la Iglesia.. En esas oraciones se pide que demos gracias a Dios por la gloria de que gozan los ángeles y que nos alegremos de felicidad, así como también, se nos invita a honrar a los ángeles y a implorar su intercesión y ayuda.

SAN GABRIEL ARCANGEL

Por decreto de la Sagrada Congregación de Ritos, se ordenó que la fiesta de San Gabriel Arcángel fuera considerada en el futuro como doble de primera clase, a partir del 24 de marzo, para toda la Iglesia occidental. Según el profeta Daniel (IX, 21) fue Gabriel el que anunció le anunció el tiempo de la venida del Mesías; que fue él, de nuevo, quien se apareció a Zacarías «estando de pie a la derecha del altar del incienso» (Lucas 1, 10-19), para darle a conocer el futuro nacimiento del Precursor y finalmente, que el arcángel como embajador de Dios, fue enviado a María, en Nazaret para proclamar el misterio de la Encarnación. Es por lo tanto apropiado que Gabriel sea honrado en este día que precede a la fiesta de la Anunciación de la Santísima Virgen. Por otro lado, existe evidencia arqueológica que el culto de San Gabriel no es en ningún sentido una innovación; hay muchas representaciones del ángel en el arte primitivo cristiano, tanto de oriente como de occidente. Este mensajero del cielo es también el santo patrón de los que trabajan en los servicios postales, de telégrafos y teléfonos.

SAN RAFAEL ARCANGEL

La Biblia sólo menciona por su nombre a tres de los siete Arcángeles que, según la tradición judío cristiana, se hallan más cerca del trono de Dios: Miguel, Gabriel y Rafael.

En el Libro de Tobías se cuenta que Dios envió a San Rafael a ayudar al anciano Tobías, quien estaba ciego y se hallaba en una gran aflicción, y a Sarah, la hija de Raquel, cuyos siete maridos habían muerto la noche del día bodas. San Rafael tomó la forma humana y se hizo llamar Azarías. Éste, acompañó a Tobías en su viaje, le ayudó en sus dificultades y le explicó cómo podía casarse con Sarah sin peligro alguno. En el libro de Tobías él mismo Arcángel se describe como «uno de los siete que están en la presencia del Señor».

Fuente: ACI Prensa

Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús

San Miguel, San Rafael y San Gabriel

Siete son los Arcángeles que están más cerca del trono de Dios; siete son los sacramentos, como siete veces siete se tiene que perdonar a otra persona.

Los Arcángeles, seres espirituales y verídicos, verídicos como son los demonios, pero unos malos y otros buenos.

Si tú temes que hacen hechizos contra tu persona, o por alguien conocido, pide ayuda a San Rafael; él ayuda eficazmente en estas fechorías que llevan a cabo en sociedad los demonios y las malas personas, que unidos a una, hacen mal y maldades. Confía pues en el Arcángel San Rafael, que te librará por la Gracia y voluntad de Dios de toda fechoría maligna, porque es un Arcángel; en cambio Satanás y sus secuaces sólo son ángeles; no están cerca del trono de Dios.

Si necesitas enviar un mensaje a Dios, vía rápida, además de la intercesión de la Virgen María, pídele al Arcángel San Gabriel que lo presente a los pies de Dios en el mismo trono del Rey de reyes.

Y para la paz en el mundo, para la Evangelización, para que Dios Espíritu Santo no halle impedimentos humanos o demoníacos a su Labor y Gracia de amar al hombre, reza al Arcángel San Miguel, caudillo de ángeles que lucharon contra Satanás y lo derribaron de la faz de Dios para encerrarlo en las profundidades del Infierno eterno. Él, el Arcángel San Miguel tiene todas las armas espirituales para luchar a favor de Dios y de los que desean un mundo para mayor Gloria de Dios, donde el Amor de Dios Espíritu Santo, se mueva en el Amor de todo un Dios y remueva la capacidad del hombre de amar, en su esencia de alma espiritual, viajando por la tierra para hallar el camino del Amor de Dios y a Dios y con Dios.

Tres arcángeles conocidos, tres ayudas que Dios nos da. Aceptémoslas con humildad.

P. Jesús
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